Wednesday, December 21, 2005

COMO SIEMPRE


Efectivamente tenia razón.
Hoy he hablado con ella y me he llevado unas cálidas calabazas. Si alguna tiene la receta para hacer tarta, que me la mande.
Hoy no me apetece hablar de como me siento, solo quiero compartir algo que escribí hace un par de meses y que hoy he vuelto a recordar.


Que ganas de que llegue una mujer, mi mujer, y plante en mi su bandera, como tierra sin dueño. Que me are, me abra y me haga dar frutos, que me construya y me convierta en un lugar civilizado. Un lugar donde se pueda sentir a gusto, alimentada, serena y dichosa.
Tengo ganas de que aparezca esa mujer a la que le apetezca conquistarme, de quien no me importe dejarme seducir. Alguien que vea las cosas buenas que hay en mi y que presienta todo el calor que preña mi corazón.
Esa mujer vendrá y no le importará si no soy alta, ni guapa, ni delgada, ni excesivamente inteligente, me querrá por lo que soy, tal como soy.
¿Vale, acaso, la pena compartir la vida de otra manera? Mutar la propia personalidad, el ser que al final una es, solo por retener a una persona al lado. Una persona que solo nos da algo de lo que precisamos e incluso a veces nada. Que es solo una sombra animada que mitiga nuestra soledad.
No diré que yo no voy a caer en una relación de este tipo. En este mundo lo más práctico para morir ahogado es decir que no se va a beber agua. Pero en este momento, en este preciso instante, a pesar de la soledad, la nostalgia de ternura y las ansias de sexo, no quiero verme metida en una "historia" solo porque sí. Solo porque no aguanto la soledad o la abstinencia sexual. En este momento de lucidez me digo que no, no te embarques en naves sin velas, no te entregues al peor postor, no te rindas a la desesperanza. Lo que haya de pasar pasará, como inevitablemente pasa siempre.
Y si es la soledad lo que viene, aprenderé a convivir con ella como amigas del alma y al final entenderé que ella ha sabido darme algo que ninguna supo darme. Mi vida será tranquila y apacible. Seré una viejecita serena, que ya está de vuelta de todo, que se entretiene con sus amigas de siempre y sus sobrinos. La vida pasará serena, dulce, sin la agitación de los que ya han pasado.

Saturday, December 17, 2005

¿Como siempre?

Esta noche, tarde noche, estuve con ella.... luego al volver a donde había dejado mi coche, me invitó a subir a su casa. Y con toda mi buena suerte, alli estaban sus amigas, en el portal de su edificio. Estoy gafada, para una vez que una mujer que me gusta me invita a su casa y tengo al menos la oportunidad de hablar con ella, conocerla un poco mejor... van y aparecen sus amigas. En fin, resignación, como siempre. Estuve con ellas en su casa, le eché una mano como una ejemplar ama de casa, jejeje lo que no hago ni en la mia.
Las escuché conversar, hablar de mujeres, lo de siempre. Que si esta está buenisima, que si fulanita está como un tren que pena que sea hetero, que si la otra no sale del armario, que si recuerda a no se quien,... Así, frase a frase, se fue encogiendo la mujer que hay en mi, hasta casi desaparecer. Y creo que no tengo nada que hacer, ella es como las demás. Como somos todas.
Yo soy una persona normal, que no estoy buena ni de lejos, que ya empiezo a dejar de ser joven. No soy alguien deseable, ni una novia para enseñar, para presumir de conquista.
Si quiero una oportunidad con alguien será porque me conozca por dentro. Las cosas buenas que yo tengo no se ven.
Así pues, creo que seguiré intentando conocerla, al final seremos amigas y yo tendré que recoger velas con el rabo entre las piernas. Imagino que con el tiempo le diré que me gusta, supongo que mandandole un poema que me recuerda mucho a lo que me pasa con ella, no creo que yo sea tan valiente de decirselo a la cara, que, por supuesto sería lo ideal. Le mandaré un mensaje con el poema y luego esperaré a verlas venir.
Es tan desagradable la barrera que levanta mi cuerpo entre yo y las mujeres... aunque reconozco que me proteje de las superficiales e infantiles.
Ni siquiera se lo reprocho porque yo pienso lo mismo que ellas y probablemente no tendria nada con alguien como yo.
Seguiré como siempre, ahí, intentando hacerme ver, hablando cuando ya no pueda más. Aceptando que no hay porque gustarle necesariamente a la gente que me gusta.
Quiero conocerla sin enamorarme, sin encapricharme, sin desear que me corresponda. No quiero sufrir por ella, no quiero que se hunda la mínima autoestima que tengo solo por no gustarle a ella. No quiero sentirme fatal porque ella alaba en otras mujeres virtudes físicas que yo no tengo ni tendré nunca.
Soy como soy, un ser muy complejo, con poca autoestima, con mis pequeños traumas, con unos cuantos problemas físicos (que seguiré luchando por solucionar) y un trabajo absorvente. Pero también soy muy buena gente, soy leal y fiel con la persona que amo, me entrego por completo, doy todo por los amigos cuando creo que se lo merecen. Creo que se escuchar y que en bastante grado soy compasiva. Intento no perder la inocencia y en la mayoría de los casos olvido el daño que me han echo, también procuro no ser rencorosa (aunque hay personas con las que no intento evitarlo).
En fin, yo también tengo muchas cosas buenas, aunque no se vean con los ojos de la cara. Espero que alguien llegará que vea lo que no se ve y que quiera compartir una parte de su vida conmigo.

Monday, December 12, 2005

Mi Señora

Pedirte, señora, quiero
de mi silencio perdón,
si lo que ha sido atención
le hace parecer grosero.

Y no me podrás culpar
si hasta aquí mi proceder,
por ocuparse en querer,
se ha olvidado de explicar.

Que en mi amorosa pasión
no fue descuido, ni mengua,
quitar el uso a la lengua
por dárselo al corazón.

Ni de explicarme dejaba:
que, como la pasión mía
acá en el alma te via,
acá en el alma te hablaba.

Y en esta idea notable
dichosamente vivía,
porque en mi mano tenía
el fingirte favorable.

Con traza tan peregrina
vivió mi esperanza vana,
pues te pudo hacer humana
concibiéndote divina.

¡Oh, cuán loca llegué a verme
en tus dichosos amores,
que, aun fingidos, tus favores
pudieron enloquecerme!

¡Oh, cómo, en tu sol hermoso
mi ardiente afecto encendido,
por cebarse en lo lucido,
olvidó lo peligroso!

Perdona, si atrevimiento
fue atreverme a tu ardor puro;
que no hay sagrado seguro
de culpas de pensamiento.

De esta manera engañaba
la loca esperanza mía,
y dentro de mí tenía
todo el bien que deseaba.

Mas ya tu precepto grave
rompe mi silencio mudo;
que él solamente ser pudo
de mi respeto la llave.

Y aunque el amar tu belleza
es delito sin disculpa
castigueseme la culpa
primero que la tibieza.

No quieras, pues, rigurosa,
que, estando ya declarada,
sea de veras desdichada
quien fue de burlas dichosa.

Si culpas mi desacato,
culpa también tu licencia;
que si mala mi obediencia,
no fue justo tu mandato.

Y si es culpable mi intento,
será mi afecto precito,
porque es amarte un delito
de que nunca me arrepiento.

Esto en mis afectos hallo,
y más, que explicar no sé;
mas tú, de lo que callé,
inferirás lo que callo.


Sor Juana Ines de la Cruz

Sunday, December 11, 2005

Soledad a media noche

Se han puesto ya
la luna y las pléyades.
Es media noche.
Pasa el tiempo.
Y yo sigo durmiendo sola.
Safo

Saturday, December 10, 2005

¡ VAAALEE....!

¡Vale! Lo reconozco, ella me gusta, me gusta mucho y me cuesta dejar de pensar en ella.
No se cuanto me va a durar, cuanto tardare en encontrar cosas que no me gustan y me hacen olvidarme, cuanto tardaré en encontrar algo a lo que poder aferrarme para no tener que luchar por hacerme ver, o tal vez me llene -- como me pasa a veces-- de sensaciones y sentimientos de variado pelaje que me obligan a hablar sin remedio. Sucedería entonces alguna de esas cosas que suceden siempre: Puede ser que sea francamente directa y me diga que ella no tiene los mismos sentimientos, que sera la forma diplomatica de decir: "Olvídate del tema". Otra opción es que me diga que aún tiene sentimientos por su ex, que ahora no puede estar con nadie. Será la forma cobarde de decir: "Olvídate del tema". Tal vez guarde silencio, meta la cabeza en un agujero en la tierra metafórico y pretenda que no le he dicho nada. Una de las peores formas de decir "Olvidate del tema". Estas son algunas de las cosas que suelen pasar, cosas que acepto que perdono y que reciclo para tratar de cimentar una amistad. Porque aunque no me den amor si es cierto que me han dado mucho: ternura, cariño, ánimos, apoyo y otras cosas de las que ahora la motosierra no me deja acordarme. También es cierto que su rechazo me ha librado en ocasiones de relacionarme con gente bastante inadecuada para mi forma de ser o mis espectativas.
Pero bueno, no hablabamos de ellas sino de ella, al menos hasta que se convierta en una más. Me gustaría sacarmela de la cabeza, por que me tiene que gustar tanto su físico totalmente normal (me recuerda una canción de Ricardo Arjona, "amarte a ti no es lo mejor pero es perfecto", es que este chico tiene cada cosa...jejeje), por que me tienen que encantar sus manos, que necesidad de derretirme ante ese tono de voz pausado y tranquilo, con un ligero acento. Es detestable en más de un sentido tener la cabeza llena de ella tantas horas del dia, a ver si se pone desagradable pronto :-) y me olvido rápido.